domingo, 21 de octubre de 2007

"Bienvenido al combate"

Hoy he seleccionado este articulo del prestigioso Arturo San Agustin. Yo, que estoy en combate contra el Parkinson, no he querido escribir nada nuevo...el autor de este artículo lo ha bordado y así lo dejo....'Bienvenido al combate', de Arturo San Agustín•

Nunca ha sido tan grande Pasqual Maragall como lo fue ayer. Ni en los Juegos Olímpicos, aquellos tiempos con gabardina, brincos y mucho oro, brilló tantoARTURO SAN AGUSTÍNNunca ha sido tan grande Pasqual Maragall como lo fue ayer. El expresidente de la Generalitat renunció ayer a cierta política. Y en esa renuncia le nació el más valiente y hermoso de los compromisos.Cuando nos enfrentamos en serio a nuestra propia salud observamos de otra manera a quienes nos rodean. Únicamente entonces sabemos que siempre estamos solos. Y da igual que estemos rodeados por los nuestros. En esos momentos siempre estamos solos. Solos están en esos momentos los ricos y los pobres. Los políticos y los barrenderos. Los tenores y las maquilladoras. También, claro, los expresidentes de la Generalitat. Solos. Hasta el Jesús del madero, que, según cuentan, era hijo de Dios, fue consciente de esa soledad.En la puerta del pabellón de San Leopoldo, en el Hospital de Sant Pau, tres pacientes vestidos con albornoz leían ayer diarios deportivos. Y unos metros más allá, en el salón de actos, Pasqual Maragall confesaba públicamente que el rumor, ese veneno que algunos --personas y partidos políticos-- saben utilizar y administrar muy bien, respondía en esta ocasión a la realidad. Es, pues, cierto, que el expresidente Maragall tiene un principio de alzhéimer.Momento históricoNunca ha sido tan grande Maragall como lo fue ayer. Ni en los Juegos Olímpicos, aquellos tiempos de gabardina, brincos y mucho oro, brilló tanto. Este oficio, que consiste en contar cosas, te permite asistir a momentos que solo el tiempo decide si fueron históricos. Yo he contado discursos, libros, películas, triunfos, fracasos. Vale. Pero solo cuando compruebas que quien te está hablando es el hombre o la mujer --no el personaje-- es cuando crees que tu oficio, que es contar cosas, sirve de algo. O puede servir. Creo que ayer, la primera vez que un político me arranca una lágrima, Maragall tuvo su mejor momento histórico. Aquel otro, el del brinco con gabardina olímpica, fue contagioso. El de ayer fue valiente, irónico, emotivo y por eso me dio de lleno en el estómago, que es donde se sienten todos los golpes que da la vida. No se sienten en el corazón sino en el estómago.No debería ser necesario que alguien influyente y principal tenga determinada enfermedad para que políticos, investigadores y periodistas se tomen en serio a la misma. No debería ser necesario, pero, tristemente, lo es. En este país nuestro las políticas sociales siguen estando más atentas a las apariencias que a las realidades y como muestra ahí está la investigación médica que, pese a todo, solo se toman en serio algunas empresas farmacéuticas. No, no debería ser necesario que alguien influyente y principal tenga determinada enfermedad para que los políticos se tomen en serio a la misma, pero, triste, lamentablemente, lo es. Por eso ayer, mientras Maragall hablaba y se comprometía, yo pensaba en esas familias con escasos recursos económicos donde el alzhéimer ordena y machaca. Quizá desde ayer habrá más esperanza en esas famlias. Quizá.Necesidad de centrosAyer, Diana Garrigosa no dijo nada, pero lo dijo todo. El lenguaje gestual es casi siempre más completo y sincero que el oral. Ayer, Diana Garrigosa estuvo también mejor que nunca. Tanto que, cuando nos saludamos, no me atreví a decirle lo que ahora sí le digo. Usted, Diana, tiene que recordar a quienes corresponda, que, además de la investigación, son urgentes, muy urgentes, centros especializados en alzhéimer que liberen a las familias de un suplicio que solo las economías domésticas muy prósperas pueden sobrellevar. Investigación, sí, pero también centros. Y al mismo tiempo, señores políticos.Cuando ya sabes que los verdaderos héroes nunca son como Aquiles piensas y escribes de otra manera. Cuando ya sabes que la vida va en serio, muy en serio, también sabes valorar más, mucho más, que alguien con influencia social se comprometa públicamente en la más justa de las guerras.Bienvenido al único y verdadero combate, capitán Maragall.

3 comentarios:

pAtzuo dijo...

Nacemos solos y morimos solos, aceptando esta premisa a vivir que son dos días. Respecto a lo de que se invierta cuando un personaje público así se expone me parece de una regresión enfermiza, en este país se nos da muy bien vender imagen, el autobombo, la pompa vamos...en vez de trabajar e invertir en investigación por un problema REAL, la vida es real. Chaqueteros fuera i visca les Maragallades. Petons.

Ireneu Castillo dijo...

Es una pena que solo se perciban las cosas cuando un personaje famoso aparece con según qué dolencias, pero esta sociedad es así y nos vemos obligados a sobrellevarla (la sociedad, no la enfermedad).

Por el resto, mira... el que lo pilla es para él y nadie nos libra de ello, solo echándole un par de cojones se puede tirar para delante, ya que por mucho que estemos acompañados, solo nosotros mismos somos capaces de sostenernos, en el convencimiento de que solo queriendo salir a flote y luchando por ello se sale a flote.

Pero oiga... que cojones! que le metimos un par al Madrid y el Bar$a perdió, y eso vale la pena celebrarlo, joer!

Anónimo dijo...

Cada vez que una persona cercana a mi le diagnostican una enfermedad o tiene un importante contratiempo no puedo dejar de pensar en nuestra fragilidad y entonces me pregunto por todas aquellas cosas materiales que luchamos; un buen sueldo, un reconocimiento laboral, una buena casa, un buen coche.... etc.etc. De repente ante mi vida hay un Stop que me para que me asienta y me ayuda a no olvidar que una buena sonrisa de mi hija, un buen dia de mi hermano, un hermoso gesto de mi conviviente es mi meta.
Que los politicos, los famosos, los ricos son humanos, aunque a veces tengamos dudas, lo son y que padezcan enfermedades es duro para ellos también y..si debido a ello socialmente se obtiene alguna mejora, pues...
Y en cuanto a Maragall, si fue grande y como a todos me llegó al corazón y al estomágo también